Dionisio Carta I
Dionísio o Areopagita — Cartas Tradução de Antonio Carneiro Carta I (pag. 383 BAC)
Ao monge Gayo1)
A luz faz invisível a Treva2). Quanto mais luz haja, menos visível é a treva. Os conhecimentos fazem invisível a ciência do não saber. Tanto menos visível quanto mais sejam os conhecimentos. Não consideres o não saber como privação, mas sim como transcendência. Então poderás dizer com toda verdade que isto é o mais certo. Nem a luz física nem os conhecimentos das coisas alcançam a compreender a ciência secreta do não saber ante Deus. Sua treva transcendente se oculta de toda luz, é inacessível a todo conhecimento. Se alguém, vendo a Deus, compreende o que vê, não é Deus3)) a quem viu, mas sim algo cognoscível de seu entorno. Porque Ele ultrapassa todo ser e conhecer. Seu Ser está mais além de todo ser. A mente não alcança conhecer-lhe. Negando-lhe, pois a existência como a nossa, negando que nosso conhecimento lhe conhece, este perfeito não saber, no melhor sentido, é conhecer àquele que está mais além de quanto se possa conhecer.
Tradução espanhola de Josep Soler, feita do grego (Migne), cotejando com versões espanholas, francesas e inglesas Epístola 1 A CAIO, TERAPEUTA4)
Las tinieblas son destruidas por la luz, y especialmente, por una luz abundante: los conocimientos destruyen la ignorancia, especialmente los conocimientos amplios. Esto lo considerarás en sentido superlativo y no privativo, enunciándolo como algo más allá de cualquier verdad, diciendo que la verdadera luz no es vista por los que la poseen y que aquella ignorancia que es según Dios, se oscurece por causa del conocimiento de las cosas; y tinieblas sobreeminentes son encubiertas por cualquier clase de luz y eclipsan todos los conocimientos.
Y si alguien, viendo a Dios, comprende aquello que ve, no es a Él mismo a Quien ve, sino alguna cosa de las que son suyas y que pueden ser conocidas por nosotros; Él mismo, sin embargo, siempre permanece por sobre la inteligencia y la sustancia, y existe más allá de la sustancia y es conocido (sólo) más allá de la mente en cuanto (existe) como negación del conocimiento y de la esencia (en cuanto es desconocido y no existe).
Y esta perfectísima ignorancia — en el recto sentido de la palabra — (constituye) la ciencia de Aquel que está más allá de todas las cosas que caen bajo (el objeto del) conocimiento.
